¿Buscas la receta auténtica de la tarta de queso La Viña? Estás en el lugar adecuado. Esta famosa cheesecake vasca se ha convertido en una de las más virales del mundo por una razón: es sencilla, rápida de preparar y tiene una textura cremosa irresistible. A continuación te contamos paso a paso cómo hacer en casa la verdadera tarta de La Viña, tal y como la sirven en el restaurante original de San Sebastián. ¡Con ingredientes básicos y sin complicaciones!
Ingredientes (para molde redondo de 25 cm)
- 900 g de queso crema tipo Philadelphia
- 500 ml de nata para montar (mínimo 35% MG)
- 240 g de azúcar
- 5 huevos tamaño L
- 1 cucharada sopera (15 g) de maicena o harina
Elaboración paso a paso
- Precalienta el horno a 220 °C con calor arriba y abajo, sin ventilador.
- Forra un molde desmontable de 25 cm con papel de hornear, cubriendo tanto el fondo como las paredes. No es necesario engrasarlo.
- En un bol grande, mezcla todos los ingredientes: queso crema, nata, azúcar, huevos y maicena. Bate con batidora eléctrica o de varillas hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.
- Vierte la mezcla en el molde forrado. Da unos golpecitos suaves para eliminar posibles burbujas de aire.
- Hornea durante 40 minutos. La superficie debe estar dorada y el centro debe moverse ligeramente al agitar el molde.
- Deja templar a temperatura ambiente y luego guarda en la nevera un mínimo de 8 horas, mejor si es de un día para otro.
- Sirve fría o a temperatura ambiente. ¡Disfruta de esta delicia cremosa y sin esfuerzo!
Consejos y trucos
- Si prefieres una tarta más dorada por encima, sube la temperatura a 230 °C durante los últimos 5 minutos.
- La textura ideal es cremosa y suave, no te preocupes si el centro parece poco hecho al sacarla del horno.
- Puedes sustituir la maicena por harina común si no tienes en casa.
- Puedes acompañar la tarta con mermelada de arándanos o frambuesa. ¡Le dará un toque espectacular!
¿Por qué es famosa la tarta de queso La Viña?
La tarta de queso La Viña es una receta creada en el restaurante homónimo del casco antiguo de San Sebastián. Su popularidad ha traspasado fronteras gracias a su sabor intenso, su textura sedosa y su facilidad de preparación. Se ha convertido en un clásico imprescindible tanto en casas como en restaurantes de todo el mundo.