El cazón en adobo es un plato tradicional de fritura de la zona del sur de España, concretamente de las provincias de Cádiz, Granada, Almería, Málaga y Huelva, y también se le conoce con otros nombres como bienmesabe (nombre que, por cierto, comparte con un conocido postre de conventos). Es sencillo y barato de preparar.
El cazón adobado no es un plato muy calórico ya que tiene unas 130 calorías por cada 100 gramos. Es una carne rica en proteínas, tiene grasas mayoritariamente insaturadas y vitaminas del grupo B (aunque menos que otros pescados), otras como la A y E, y minerales como fósforo, el potasio, el magnesio y el hierro.
Cómo preparar un buen cazón en adobo
Ingredientes:
- 1 Kg. de cazón
- 6 dientes de ajo
- 1 vaso de vinagre de Jerez
- 100 gr. de harina
- Comino (una cucharada de postre)
- Un poco de orégano (1 cucharadita)
- 1 poco de pimentón dulce (aproximadamente una cucharada de postre)
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Sal
Preparación:
- En primer lugar, limpiamos el cazón y lo cortamos en tacos. Como consejo: si lo tenemos congelado, es más fácil cortarlo antes de que se descongele para que los trozos sean más homogéneos.
- Se pican los ajos (sin quitarles la piel), el orégano, el pimentón, el comino en un mortero y después se incorpora el vinagre.
- Echamos la mezcla anterior sobre el cazón y movemos para que todo quede bien condimentado y cubrimos con agua. Dejamos en el frigorífico al menos 8 horas.
- Transcurrido ese tiempo, se escurre bien el cazón. En una sartén preparamos aceite abundante y en un plato, harina. Cuando esté caliente, enharinamos el cazón y lo doramos en la sartén.
- Al sacarlo, para que escurra bien el aceite, lo colocamos sobre un plato con papel de cocina para que absorba el exceso.
Para servir el cazón en adobo, podemos colocarlo sobre una fuente con una base de lechuga o con algunas patatas fritas. Otra forma típica es echándole un chorrito de limón.