Las setas son un producto típico de la época de otoño y tienen muchas propiedades como sales minerales como fósforo, hierro y potasio. Las recetas que se pueden hacer con las mismas son variadas, aquí te proponemos un rico arroz con setas silvestres, que son las más habituales de encontrar en el supermercado, si bien se pueden emplear tipo boletus o setas Shiitake.
Cómo cocinar el arroz con setas silvestres
Ingredientes (para 2 personas):
- 250 gramos de setas silvestres
- Dos tazas de arroz (preferiblemente salvaje)
- Una cebolla
- Dos dientes de ajo
- Perejil fresco
- Medio vaso de pasas
- Medio vaso de vino blanco
- 1 litro de caldo de pollo
- Aceite de oliva
- Medio litro de agua
- Sal
Preparación:
- En primer lugar, lavamos bien las setas y las dejamos escurrir. Cuando se haya ido casi toda el agua sobrante, las troceamos al igual que la cebolla. Reservamos ambas en un plato.
- Si el arroz es salvaje, hay que lavarlo previamente en un colador con agua fría. En caso contrario, igualmente es conveniente para que pierda parte del arsénico que tiene.
- En la cazuela donde vayamos a cocinarlas, preferiblemente ancha pero no profunda, echamos un poco de aceite. A continuación añadimos la cebolla y movemos. Cuando se quede blanda y transparente añadimos el arroz y el vino blanco. Removemos el conjunto y dejamos a fuego medio hasta que veamos que el vino se reduce a la mitad.
- A continuación, incorporamos el caldo de pollo (si es posible calentarlo algo previamente), las setas y las pasas. Después el perejil y los ajos (que hemos picado antes). Dejamos a fuego lento y rectificamos de sal si es necesario. Hay que considerar que el caldo de pollo ya lleva, por lo que conviene no añadir demasiada por si el resultado es muy salado.
- Vigilamos de vez en cuando, añadiendo agua o sal, según sea el caso, comprobando que el grano de arroz ya no esté duro. Más o menos el tiempo de cocinado es de unos 40 minutos, pero depende del tipo de arroz que se emplee. Si no es salvaje, con 20 minutos es suficiente.
- Una vez cocinado, dejamos reposar de 3 a 5 minutos antes de servir. Es recomendable hacerlo en cuencos de barro para que conserve mejor el calor.
